El contacto físico en mamíferos es tan necesario como el alimento, para su desarrollo: en cualquier etapa de la infancia, podemos observar que cuando están en entornos relajados y en confianza, su juego y forma de relacionarse siempre lleva el contacto físico, tanto desde bebés y niños pequeños hasta incluso la adolescencia.
Para disponer de seguridad en la escuela, se están imponiendo normas de comportamiento que están muy alejadas de las necesidades básicas de los/as niños/as. Esto, inevitablemente irá acumulando tensión emocional que acabará saliendo en forma de comportamientos no habituales.
Como p/madres necesitamos estar preparados/as para acogerlas con serenidad y ofrecer toneladas de cariño y recursos para canalizarlas. El masaje es una forma de comunicación que ayuda a establecer y mejorar el vínculo afectivo, una herramienta fantástica para ayudar a aliviar tensiones emocionales acumuladas y potencia incluso el sistema inmunológico.
Si te interesa conocer algunos recursos de masaje infantil, pásate por aquí próximamente o subscríbete para que pueda avisarte.
