Ya sabemos que el masaje tiene innumerables beneficios, especialmente los bebés que todavía no han aprendido el movimiento voluntario y el grado de estimulación durante los primeros meses es muy elevado dado que todo es nuevo. Por esta razón, acumulan gran cantidad de tensión en sus pequeños cuerpos, tensión que descargarán durmiendo o llorando.
El masaje es una herramienta fantástica para ayudarles a regular dicha acumulación de tensión.
De acuerdo, lo tengo claro. Me preparo con mi bebé. Por la noche parece un buen momento, después del baño, por ejemplo. Ay, no se por dónde empezar. ¿Y si le hago daño? Vaya, parece parece que le molesta, ¿tendrá frío? Ostras, se pone a llorar, pero, espera que acabe de darte este masajito rico, cariño, que te sentará genial. ¿Tienes hambre? Ya, en seguida acabo…
Podemos poner toda nuestra buena intención, pero puede acabar siendo un desastre, y finalmente nos desmotivamos y lo dejamos. Privando así a nuestra bebé y nosotras mismas de un espacio de dedicación, amor y respecto que de convertirse en un hábito, nos puede ayudar en múltiples y diversas ocasiones.
7 Pasos para conseguir el éxito
Si sigues estos 7 pasos que te explico en el vídeo, sin duda resultará una experiencia agradable para tu bebé, y podrás usarlo siempre que lo desees, ya sea para aliviarle un malestar o para disfrutar de un espacio de calidad con él o ella.